Carolina Marín Martín
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Érase una vez una niña, nacida en Huelva, a la que le gustaba mucho el flamenco. Un día, jugando con su amiga Laura, ésta le contó que se había apuntado a clases de bádminton, y le preguntó que si quería acompañarla. A Carolina le pareció buena idea, y con solo ocho años, acompañada siempre de su amiga, iba al colegio, a flamenco y a bádminton.
- ¡Carolina!! ¡Venga que llegamos tarde a flamenco! – Le dijo un día su madre. - ¡No! No quiero ir más. – Le respondió Carolina. - ¿Por qué?- Preguntó su madre, sorprendida. - Porque prefiero ir a bádminton mamá. – Contestó. Fue entonces cuando Carolina se dio cuenta de que le apasionaba el bádminton y decidió dejar el flamenco y dedicarse completamente a la raqueta. Tenía 12 años. Entrenaba con el Recreativo Bádminton IES La Orden, con el que la pequeña, con solo 13 años, ganó su primer campeonato nacional. Su gran hazaña hizo que, con 14 años, emprendiera una nueva aventura en Madrid, en la Residencia para deportistas de Alto Rendimiento, Joaquín Blume. Fue aquí donde conoció a su entrenador, llamado Fernando Rivas. Cada vez que entrenaban, Fernando le decía una frase clave que siempre motivaba a Carolina: ¡Puedes porque piensas que puedes! |
Y en todos sus partidos, Carolina nunca pasaba inadvertida, no solo por su rapidez y efectividad, sino por el grito que emite cada vez que marca un punto. Un día su entrenador le preguntó que porqué emitía ese ruido, a lo que con mucha seguridad, Carolina respondió:
- La explicación es muy sencilla: para liberar el estrés, pero sobre todo para intimidar a mi rival. Pasaban los años, y Carolina iba consiguiendo cada vez más logros, viajando por todo el mundo para competir. Hoy, es Campeona Olímpica en Río 2016, 3 veces Campeona Mundial y 4 de Europa, y es pionera de bádminton en España y Asia, donde es muy aclamada. Además, tiene entre sus Medallas, la de la Real Orden del Mérito Deportivo y la de Andalucía; y en Huelva, el Palacio de Deportes, lleva su nombre. Cuenta que cuando llega a casa, después de una fuerte competición, lo que más le gusta es desconectar el móvil, tumbarse en la playa de Huelva y comerse unas gambas. ¡Y colorín colorado, con el triunfo de Carolina, Andalucía también ha ganado! |